Capítulo 48
Diciendo, se dirigió al despacho, pero con los guardias de seguridad, Jorge no pudo entrar.
No pudo evitar abrir la boca y maldecir con voz aguda y fina:
-Lorena, ¿de qué estás orgullosa? Sólo eres una mujer que nadie quiere, no creas que yo no sepa que te metiste en el asunto de ayer, perdiste a tu propio hombre y andas por todas partes, ¡mereces que
nadie te quiera!
No sabia que Juan también participó, pensaba que era Lorena gastando dinero para vengarse de él.
Lorena no quiso hacer caso a este tipo de cabrón.
Les dijo a los guardias que llamarara a la policía si seguía así.
La grabación se desarrolló sin problemas por parte de la televisión.
Aquellos cuatro internos eran educados y trabajadores, y tenían personalidades agradables, cada uno con su propio estilo, especialmente Leticia.
El día que empezó la grabación, Lorena incluso acudió a la ceremonia de apertura.
Todos estaban presentes pero el personal dijo que habla un invitado misterioso que no llegó.
Decian que era un bailarin profesional de Paldin, una famosa compañía de danza, que vino a trabajar como juez, y que llevaba una máscara delante de la cámara y no le gustaba mostrar su cara.
Lorena miró al personal ocupado y se sentó en una silla para esperar.
El sonido de los tacones altos siguió, acercándose cada vez más.
El director, que no estaba lejos, lo recibió de tono adulón:
-Es un gran honor tenerle aquí, of que baila usted para la Compañía de Danza Paldin, ¡que es la mejor
del mundo!
La otra sonrió y se alborotó el largo cabello, su voz cayó en los oidos de Lorena lentamente:
-Llevo tres años fuera de la ciudad natal, sigo prefiriendo este entorno.
Lorena se quedó quieto al oír la voz…
Se dio la vuelta y vio a Susana que estaba de pie, sonriendo e conversando con el director.
Lorena se puso un poco rigida, era difil de distanciarla.
Susana levantó los ojos y también vio a Lorena, quizá porque tenia intención de darle asco, se acercó a Lorena y se enganchó los labios, con voz agradable y suave:
-¡Señora Suárez, qué casualidad, no esperaba que viniera personalmente a acompañar a los pasantes!
Lorena se quedó sentada, inexpresiva, mirándola de reojo un momento, con los labios entreabiertos en
una risa significativa:
-Pensé que usted preferia encontrar una grieta en el suelo para esconderse en este momento, pero no pensé que todavia se atreveria a aparecer…
El director, que acababa de regresar al pais, desconocía la historia entre las dos mujeres, se adelantó y
dijo:
-Señora Suárez, esta es la misteriosa invitada recomendada por el señor Rojas, Susana Fernández, va
a actuar como juez de esta selección.
¿Sr. Rojas, Luis Rojas?
Recordaba vagamente que la madre de Luis Anatasia Moreno, era la hija mayor del Grupo Chen, y el padre de Luis era el famoso director Xiao Baosheng, que tenía mucho que decir en el circulo.
Lorena le vio con una mirada desenfadada: -¿Una pasante despedida se convierte en juez? Parece que tienen un horario bastante aleatorio para este programa.
El director hizo una pausa y parpadeo perplejo.
Susana la miró con suficiencia y sonrió mientras le explicaba:
-No pude evitarlo, le dije a él que quería empezar de cero pero él me dijo que era demasiado trabajo, que tenía un bebé que cuidar y que no quería que estuviera tan cansada, así que tuve que trabajar como
juez.
Se tapó la boca y se rió suavemente, presumida.
Pensaba que la opinión pública la había aplastado totalmente, pero ella ganó la oportunidad de
aparecer ante el público otra vez.
-Señora Suárez, no se preocupe, no tomaré venganzas personales aprovechando el poder como usted.
trataré a todos por igual.
Susana miró a los conocidos en el escenario con una mirada significativa, especialmente a Leticia, y
cruzó los ojos la ferocidad.”
Lorena supo al instante quién era -él-.
Se levantó con una sonrisa en los labios, sin mirar siquiera a Susana: -Gallinas pueden asistir.¿es este espectáculo todavía para el ser humano?