Capitulo 37
La cuestión subió a un nivel más alto con esas palabras.
-Cuantas más Susana haya, menos Lorena habrá.
El acalorado maldecir desapareció en un instante.
En cambio, los que hablan simpatizado con Susana estaban indignadas de la injusticia sufrida por
Lorena.
Las cuestiones que se ocultaban deliberadamente salieron a la luz.
Eso representa el resentimiento y la agresividad de las mujeres en el trabajo.
Las estrellas de primera y segunda fila de Entretenimiento Aguila también mostraron su opinión.
Dijeron que la protección de la empresa para los actores era excepcionalmente estricta, y tenian acompañia para cada fiesta, no había absolutamente reglas secretas.
Esta noche no fue tranquila.
A Susana le costaba aún más dormirse.
Los internautas empezaron a investigar su pasado y ella entró en pânico.
Numerosas llamadas a Juan quedaron sin respuesta.
Mirando al niño que dormia en la cama, apretó los dientes y directamente le quitó la ropa y lo colocó en
el balcón….
A las tres de la madrugada.
Juan recibió una llamada del hospital diciendo que Pedro tenía mucha fiebre.
Arrugó las cejas, pero aun asi se apresuro al hopital con Diego.
No esperaba que este asunto se invirtieran tantas veces.
En un principio, cuando ocurrió el incidente por parte de Lorena, iba a esperar a que se tranqulizara y luego que Susana saliera a dar explicaciones, al menos durante dos dias.
Resultó que Lorena se dio la vuelta ese mismo dia.
No podia expresar lo que habla en su corazón, algo de pérdida y algo de admiración.
Una vez más, refresco su percepción de ella.
Pero con Susana sólo tuvo decepciones inesperadas.
Aún le pidió que le salvara la vida, realmente pensaba que estaba en peligro.
No sabia que era una obra dirigida por ella misma.
Asi que no contestó ni una sola de las llamadas de Susana en todo el dia.
Ese hospital privado era propiedad de su familia, acudió en mitad de la noche tras recibir una llamada del hospital.
Fuera de la sala.
Miró a Susana, todavía en pijama, con el pelo revuelto, los ojos rojos e hinchados de llorar, sentada en una silla desordenada, culpándose y compadeciéndose de sí misma, glmoteando.
Esa aprariencia lastimera la transformó de la mujer astuta a una madre gentil.
La mirada de Juan tenia lo complicado antes de acercarse finalmente.
Susana levantó la vista y, al mirarle, las lágrimas brotaron con más violencia aún, se levantó y le rodeó
la cintura con los brazos.
Como si encontrara un trozo de madera a la deriva en el que apoyarse, el gemido fue incontrolable:
-Julio me dijo que cuidara del bebé antes de morir, no lo hice, lo siento Julio, no viviría si algo le hubiera
pasado a Pedro….
Al oír ese nombre, el ceño de Juan se frunció y alargó la mano para acariciar el hombro de Susana, con
voz grave:
-Todo irá bien, no pienses demasiado.
Mientras hablaba, el médico salió de alll:
-Sr. López, el señorito tiene fiebre alta, Como lo llevaron demasiado tarde, ahora hay sintomas de inflamación en los pulmones, después de la reanimación, todavía no es estable, tenemos que esperar
hasta mañana para ver si la fiebre puede bajar.
Juan mostró una cara grave y el médico suspiro:
-La enfermedad del niño fue muy repentina, y le salió bien la revisión médica de hace unos días.
Es realmente extraño, si la fiebre no baja mañana, podría haber otras complicaciones, infección en los pulmones y el cerebro, y entonces las cosas podrian ponerse realmente mal.
Susana se estremeció y luego se puso rigida, con el rostro pálido mientras levantaba la vista y las lágrimas le corrian por la cara:
-Juan, salva a Pedro, por favor…
El rostro de Juan se tensó al mirar al médico:
-Hay que salvarlo a toda costa.